¿Por qué cristaliza la cassalla? La ciencia detrás del ritual cassallero

La cazalla cristaliza en frío por el anís natural que contiene. Es señal de calidad. Si el vaso está húmedo, se vuelve blanca. El punto Faro: del congelador, que queme i que deixe records.

 

¿Por qué cristaliza la cassalla? La ciencia detrás del ritual cassallero

Seguro que lo has visto en nuestros Reels o lo has vivido en tu bar de confianza: sacas la Faro de Cullera del congelador, sirves un chupito y… magia. Se forman unos cristales dentro de la botella, como escarcha, como hielo con superpoderes. ¿Y el trago? Frío, potente, con esa quemazón gloriosa que solo entiende el cassallero de veritat.

Pero, ¿qué está pasando ahí dentro? ¿Por qué cristaliza la cazalla? ¿Es normal? ¿Es buena señal?

La respuesta corta es: .
 La respuesta larga… te la contamos ahora, que esto tiene ciencia, cultura y sabor.

🧪 ¿Qué es lo que cristaliza?

La cazalla, como nuestro Faro de Cullera Original, es un aguardiente anisado seco con alta graduación (46 %). Al contener una alta proporción de aceite esencial de anís (anetol), este se mantiene perfectamente disuelto en el alcohol... siempre que esté a temperatura ambiente.

Pero cuando metes la botella en el congelador (temperaturas por debajo de 0 °C), el alcohol sigue líquido… pero el anetol empieza a solidificarse, formando pequeños cristales o nubes blancas dentro del licor.

🔬 Es el mismo fenómeno que ocurre con algunos aceites esenciales naturales cuando bajan mucho de temperatura. No es malo, ¡es buena señal! Significa que tu cazalla tiene anís de verdad y en buena cantidad.

❄️ ¿Por qué la cazalla se pone blanca a veces?

Otro fenómeno que suele confundir (pero mola mucho) es el del efecto lechoso o blanco al servir la cazalla, sobre todo en vaso húmedo o con hielo.

Esto ocurre por una reacción llamada efecto ouzo (sí, como el licor griego), donde al mezclar alcohol anisado con agua fría, el anetol ya no puede mantenerse disuelto y se vuelve opaco. No es que se estropee, es que te está diciendo que está en su punto más fresco y potente.

Así que ya sabes: si el vaso está un pelín mojado, o si lo sacas recién lavado, la cazalla se volverá blanca al contacto. Y si has tenido buen ojo, verás esos cristalitos que parecen decirte “bebe’m ja”.

🥶 ¿Cuál es el punto perfecto?

Para nosotros, el punto Faro es claro:

Botella directa del congelador + vaso seco y frío + primer trago que queme.
Això és el ritual cassallero.

Y sí, puedes hacer el test: si no cristaliza, no es Faro.

Nuestra Faro de Cullera Original tiene la proporción justa de anís y alcohol para que esto ocurra. Y si te atreves con la Faro de Cullera Oro, prepárate para una explosión gélida con 66 °C y cristales dorados que brillen més que el teu futur.